En este, el segundo álbum sin el “Little”, la carrera artística de Wonder, manejada por la Motown, presentaba la misma combinación de canciones de Broadway y solos de armónica de las anteriores grabaciones. De aquí podemos mencionar tres singles relativamente exitosos: “Hey Harmonica Man” (el único enentrar en los charts), “Castles In The Sand” y “Happy Street”. Tal y como era la moda, la temática ronda las cuestiones de la playa y los surfistas sin demasiado éxito. Es a partir del siguiente disco que Wonder podrá comenzar a mostrar su propio talento, pero esta grabación vale por su peso testimonial y en la secuencia de compartir en P&C la discografía completa de este genio de la música del siglo 20.
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